“En “ATT” (A Todo Trigo) comenzamos 48 horas “ATR” (A Todo Ritmo). A continuación, el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Julián Domínguez, nos va a contar lo que va a pasar cuando llegue el trigo HB4 a nuestros mercados, cómo vamos a salir de esta situación”, fueron las primeras palabras del presidente de la Federación de Acopiadores, Fernando Rivara, en el inicio del congreso.
Bajo el lema “Avanzar o retroceder, esa es la cuestión”, A Todo Trigo 2022 volvió a la presencialidad para volver a repasar los temas de la agenda del sector.
En uno de los tramos salientes de un discurso con serios cuestionamientos a las políticas públicas planteó que “en 20 años se recaudaron 150 mil millones de dólares solo por retenciones. Y estamos peor que antes. Se regaló plata a manos llenas, se eligió el asistencialismo sobre el fomento a la creación de puestos de trabajo y encima se descalifica a los que crean riqueza”.
Rivara agregó que “los fideicomisos privados obligatorios de oleaginosas, maíz y trigo son retenciones encubiertas y, por lo tanto, ilegales, que no están aprobadas por el Congreso y retienen nuestro dinero sin consentimiento”.
Enfatizó que “en los últimos 50 años, mientras nuestra producción agrícola-ganadera aumentó seis veces, la de Brasil se multiplicó por 14 y sus exportaciones por 70. Los argentinos gastamos ese tiempo discutiendo cuál fue el peor gobierno y seguimos en caída libre, haciendo las cosas a contramano del mundo”.
Para el presidente los acopiadores, “genera un gran enojo en la sociedad ver que el Congreso aún tiene más de 10.000 empleados y el Senado aumenta sus gastos un 86% anual mientras crece la pobreza, la indigencia, la deserción escolar y el narcotráfico”.
Además, se refirió al gasto público de los tres niveles del Estado (Nación, provincias y municipios), que pasó del orden del 30% del PBI entre 1980 y 2007 al 45% del PBI actual. “Este 15% de aumento representa una suba de 60 mil millones de dólares por año del gasto, y eso explica las subas de impuestos, deuda pública e inflación. Ese valor está muy cerca del total de las exportaciones anuales del país y es muy superior al último préstamo del FMI”.
Rivara también hizo hincapié en una de las últimas novedades políticas para la agroindustria: “El 14 de marzo el gobierno nacional aumentó 2 puntos los DEX al aceite y harina de soja, lo que –traducido al común- fue sacarle a los productores 400 millones de dólares al año para subvencionar, con esa plata, a las harinas de trigo. Da estupor escuchar a Feletti decir que es un esfuerzo del gobierno nacional y ver que pidió que en las bolsas de harina se imprima la frase Harina con subsidio del Estado”.
La incidencia del trigo en el precio del pan
Rivara explicó dos conceptos: uno es el de “el sesgo de la mención confusa”, que consiste en comparar el precio de mil kilos de trigo con el de un kilog de pan. “¿Alguien escucho alguna vez decir que el kilo de trigo cuesta unos 44 pesos y que se necesita 1,1 kilo de trigo para lograr 1 kilo de pan, que vale 270 o 300 pesos? Imaginemos lo que piensa el público cuando se le dice que el trigo vale 44.000 y el pan 270”.
Tmabién abordó “la trampa de los porcentajes”, que es la de comparar porcentajes de variación en lugar de hablar de valores absolutos: “Por ejemplo, entre enero 2021 y marzo 2022, tanto el trigo como el pan de Precios Cuidados aumentaron 80 por ciento, eso puede llevar a pensar que el pan aumenta porque aumentó el trigo y esa idea se instala fácilmente para culpar a los productores de eso, pero no hay nada más alejado de la realidad. Alcanza con ver que el 80 por ciento que aumentó el trigo significó 16 pesos por kilo, mientras que el incremento del 80 por ciento del precio del pan con Precios Cuidados fue de aproximadamente 120 pesos por kg. Y como se necesita 1,1 kilo de trigo para hacer 1 kilo de pan, solo 18 de los 120 pesos que aumentó el pan se pueden atribuir a la suba del trigo, incluyendo los efectos de la invasión rusa. ¿Los otros 102 cómo se explican? Eso revela el sin sentido de la intervención estatal”.
Intención de siembra
En otro momento planteó que “los informes de intención de siembra de trigo dicen que no aumentará la superficie. ¿Cómo puede ser que ustedes, los productores, no quieran “juntarla con la pala” como dicen algunos funcionarios y periodistas? ¿Será que el aumento de los costos supera al de los precios de venta, a los que encima se le agregan las amenazas cotidianas de más presión impositiva?”.
Rivara enumeró los principales temas que la Federación de Acopiadores propone incorporar en una agenda para un acuerdo marco de coincidencias, entre los que está la eliminación del Art. 755 del Código Aduanero, leyes de fertilizantes, semillas y de Fomento Agroindustrial, normalización dominial de acopios en terrenos ferroviarios, seguro agrícola, inserción internacional con desarrollo de exportaciones, reorganización impositiva en concordancia con países competidores, Ley de Buenas Prácticas Agrícolas y reglas de juego permanentes y estables.
Antes del cierre, citó a José Pepe Mujica, el expresidente uruguayo, que en su despedida política dijo: “Yo tengo mis buenas cantidades de defectos, pero en mi jardín hace décadas que no cultivo el odio, porque aprendí una dura lección que me impuso la vida: que el odio termina estupidizando, porque nos hace perder objetividad frente a las cosas. El odio es ciego como el amor, pero el amor es creador y el odio nos destruye”.
“No nos estupidicemos”, concluyó Rivara.
La palabra del Gobierno
La participación del ministro Julián Domínguez fue tras publicarse la autorización a “comercializar la semilla, y a los productos y subproductos derivados de ésta”, referido al denominado trigo HB4.
“La biotecnología y el desarrollo de conocimiento es una alternativa fundamental para combatir el cambio climático” dijo y ante los cuestionamientos agregó “no soy un trastornado para perjudicar al trigo argentino; estamos tomando todos los recaudos para proteger la comercialización con los mercados asiáticos”.
Sostuvo que el HB4 es una alternativa y una respuesta del cambio climático. “Esta problemática se combate con infraestructura, pero también con biotecnología”, enfatizó.
“Creo fervientemente que podemos exportar 200 millones de toneladas. Estamos trabajando para eso con infraestructura y biotecnología. Y eso no se logra solamente aumentando la superficie sembrada, también se hace aumentando los rindes. Y esa es una alternativa que nos brinda la biotecnología”, razonó.
Dirigiéndose a Fernando Rivara señaló que “así como tu generación hizo una revolución en la agricultura argentina, las nuevas generaciones también harán otra por el lado de la biotecnología”.
“La industria del conocimiento es la segunda en exportaciones detrás del sector agropecuario. Tengamos confianza en nuestras empresas, en nuestra innovación y nuestra tecnología”, agregó luego.
Sobre las expectativas para esta campaña de trigo, el titular de la cartera agropecuaria nacional realizó una encendida arenga hacia los productores: “Necesitamos de ustedes, los que están peleando en el campo, en los negocios, tenemos que capitalizar la energía de ustedes. Quiero que nos vaya bien. No nos achiquemos con Brasil. Estamos mejor que ellos, en muchos aspectos”, remarcó
Sobre las retenciones y la presión impositiva dijo: las retenciones van a quedar como están. Es un compromiso que tiene el respaldo del presidente Alberto Fernández”.
Por su parte. el ministro de Desarrollo Agrario de la provincia de Buenos Aires, Javier Rodríguez, también dijo presente a través de un mensaje grabado desde Brasil.
“Para nosotros la producción de trigo es fundamental y por eso venimos desarrollando políticas para impulsar la actividad en al menos cuatro ejes”, dijo y enumeró: impulsar la calidad y diferenciación de trigo con el objetivo de impulsar el agregado de valor, articulación con el Banco Provincia en cuanto al financiamiento que estará muy presente en esta campaña, impulso a la infraestructura, innovación en tecnología en chacras experimentales, desarrollando un trabajo conjunto entre el INTA y el sector privado de innovación en genética y prácticas.